12 Diciembre 2016

El pasado domingo 27 de noviembre, 57 Jefes de Estado y de Gobierno de la Francofonía expresaron su preocupación por la expansión de la comercialización de la educación y reafirmaron su compromiso a favor de una educación pública de calidad. Al mismo tiempo, en una histórica declaración, un grupo de 302 organizaciones de la sociedad civil de 38 países del área francófona lanza un llamado contra la comercialización de la educación

Artículo reproducido con la amable autorización de Adelaida Entenza, de CLADE

Con informaciones de Global Initiative for Economic, Social and Cultural Rights (GI-ESCR)

La reciente Declaración de Antananarivo, adoptada al culminar la XVI Cumbre de la Francofonía, que tuvo lugar en Madagascar los días 26 y 27 de noviembre, se constituyó como un compromiso político fundamental en contra la comercialización de la educación en el mundo. En ella, los 57 Estados Miembros de la Organización Internacional de Francofonía (OIF) expresaron su preocupación con el “desarrollo de establecimientos académicos y educativos con fines comerciales”.

Los Estados francófonos solicitaron además a la OIF que “en colaboración con la sociedad civil” tomen medidas para promover mecanismos institucionales eficaces para la regulación de los actores privados en la educación, a fin de garantizar la calidad y la equidad de los servicios educativos.

Al mismo tiempo, en una histórica declaración, un grupo de 302 organizaciones de la sociedad civil de 38 países del área francófona lanza un llamado contra la comercialización de la educación. Este llamado advierte contra las diferentes formas de comercialización en los sectores de la educación formal y no formal y se opone a la transformación de la educación en una mercancía, y en particular, insta a los Estados a poner en marcha sistemas educativos públicos de calidad y totalmente gratuitos, a regular la educación privada y a eliminar los establecimientos educativos con fines comerciales.

La red francófona de la sociedad civil contra la comercialización de la educación fue
impulsada en marzo de 2016 por iniciativa de seis organizaciones: la Coalición de Educación Francesa, el Comité Sindical de la Educación y la Formación, la Fédération internationale des Céméa, Global Initiative for Economic, Social, and Cultural Rights, Right to Education Project, y Solidarité Laïque. Actualmente cuenta con 302 organizaciones miembros que firmaron el llamado de la sociedad civil francófona contra la privatización de la educación. La red trabaja para promover una reflexión y movilización colectiva frente al creciente papel y el impacto de los actores privados en la educación formal y no formal en toda la zona francófona, reuniendo diversos actores de la educación (ONGs, asociaciones, Sindicatos, investigadores).